La presidente de la Sociedad Rural de Rafaela, Norma Bessone, hizo referencia al momento que está viviendo el sector agropecuario y se mostró muy preocupada por la política de nuestro país: «venimos de políticas que nos han llevado a un alto porcentaje de pobreza, y no queremos repetir los viejos errores», dijo.
El sector agropecuario se preocupa y piensa cómo deberá encarar el futuro tras la pandemia del COVID-19 (Coronavirus), contemplando nuevas políticas de modo que productores, industriales y Gobierno trabajen consensuadamente en pos de un fortalecimiento. El campo necesita pensar en el día después de esta crisis sanitaria y buscar la mejor preparación posible y por ello es que consideran preciso impulsar nuevas políticas públicas que permitan al sector agropecuario lidiar con las crisis que se puedan presentar y asegurar, sobre todo, la subsistencia de los pequeños productores y las familias campesinas, que siempre en este tipo de contingencias son los más vulnerables y afectados.
«Estamos en un momento muy difícil. No soy para nada original en la apreciación, donde todo este tsunami que nos ha atravesado y que nos queda reflejada la problemática real que sufren los problemas endémicos que tiene la Argentina, y nos ha tirado una fotografía clara de cuáles son los reales problemas que tenemos en el sector, efectos indeseables como la emisión de dinero, la intervención del Estado, el temor… y por otra parte un estado sin capacidad de endeudamiento, que es otra la cuestión que a uno le preocupa y que complejiza más la situación que estamos viviendo», expresó en Radio Universidad CASTELLANOS en primera instancia la titular de la Sociedad Rural de Rafaela, Norma Bessone, que desde que asumió, prácticamente tuvo que gestionar acciones que se asocian a esta pandemia.
«Sabemos cuándo y cómo termina la cuarentena, y sin ser dramática debemos decir que venimos hace 70 años con políticas que cada vez nosotros apreciamos con mayor porcentaje de pobreza y eso es realmente alarmante. Tenemos 7 millones de aportantes, 20 millones de trueques en la parte asistencial, por lo que es un número que hace a una enorme preocupación porque tenemos que pensar en diferentes estrategias, es un momento de crisis muy fuerte y las crisis son oportunidades, y como tal debemos pensar nosotros en tratar de sumar estrategias y tratar de generar políticas de estado que realmente nos permitan reconstruir la sociedad desde la ética republicana», dijo en un tono de preocupación la titular de la entidad.
Sector totalmente involucrado
La Rural considera imprescindible la tarea de generar acuerdos y compromisos entre los actores del sector buscando proteger tanto a los productores como a los consumidores que salen perjudicados: «nuestro sector no es insensible a lo que se está viviendo. Al contrario, nosotros desde la hora cero nos hemos puesto a disposición de todos los equipos de trabajo y por supuesto hemos estado al lado de los productores y cerca de todos los integrantes del sector y seguimos de la misma forma, informando, capacitando y resolviendo todas las problemáticas que van surgiendo. El tema de la solidaridad aparece desde la institución, en todo momento. No es que haya insensibilidad, en absoluto», manifestó Bessone y agregó que «nuestras instalaciones están a disposición del Sr. Gobernador, como así también todas las sociedades rurales y posteriormente de los presidentes comunales y los intendentes. Y como tales, estamos procediendo y estamos actuando, a total disposición de las necesidades. Y toda la parte de colaboración, bueno es una cuestión que se hace en forma privada y cada uno lo va resolviendo. No hay necesidad que para colaborar tengamos que etiquetarnos o tener una presencia determinada. Ese calificativo está muy lejos de lo que esencialmente hacemos y procedemos. A veces también debemos tener un especial cuidado con el manejo y el uso de las redes, porque desde el anonimato es muy fácil atribuir cuestiones. Pero el trabajo que venimos haciendo es un trabajo muy serio, responsable y muy en coordinación con las autoridades locales y el Ministerio de la Producción», destacó.
En tanto, dijo que «nuestro trabajo nace desde lo equipos de sociedad Rural, de nuestras comisiones, sino que también tenemos un funcionamiento muy activo con consejos de CARSFE, con las subcomisiones que actúan y con todo este sistema que manejamos con las teleconferencias, para intercambiar las experiencias y pensar en otras acciones post pandemia. Hoy nuestra enorme responsabilidad es pensar en el sector productivo y con sentido solidario, ético y reconstruir una sociedad que necesita de trabajo genuino», argumentó.
La seguridad: un tema de real preocupación
Al igual que en muchas ciudades y en muchos sectores determinados de la sociedad, la inseguridad reina y preocupa demasiado a las personas. Si bien hoy la pandemia se lleva toda la atención, el alto nivel de delincuencia continúa y afecta mucho al campo: «este es un tema grave del sector que nos preocupa mucho. No solamente en los robos que se sufren en las diferentes propiedades rurales, sino también los cortes de silobolsas y otros casos muy serios. Es una preocupación en la que venimos insistiendo, más otras tantas que nos aquejan, como la altísima presión impositiva, el problema de conectividad en las zonas rurales, la infraestructura, ya que ante la mínima lluvia se complica llegar a los campos», dijo Bessone al respecto y añadió que «entendemos la necesidad de proteger a la ciudad, a sus habitantes con respecto al problema que tenemos, y por otra parte, las actividades que tenemos, inherentes a la producción, no pueden pararse y tienen que seguir, y la producción de alimentos es fundamental. Necesitamos llegar a los puertos, vender los productos y hacer las actividades básicas que nos llevan a estos resultados. Además, nos preocupa la gran bajante del río Paraná, por lo que se dan muchas cuestiones donde necesitamos estar presentes y a la vez ir viendo formas y negociaciones, para generar políticas de estado y acciones que nos lleven a mejorar esta situación», mencionó.
Las charlas con los funcionarios
Al consultarle por el diálogo que la entidad local mantiene con el ministro de la Producción, Daniel Costamagna, oriundo de nuestra ciudad, Bessone dijo que «tenemos diálogo constante con el Ministro, con diferentes integrantes de su equipo, con las autoridades locales, por lo que hay un diálogo constante. Obviamente que a veces no coincidimos en algunos puntos de vista, pero eso no hace que uno se distancie, sino que eso es lo que hace interesante la convivencia. Es necesario que aprendamos a compartir desde una misma mesa los que pensamos diferente para acciones comunes», estableció. Además dijo «que el campo sea una de las actividades esenciales desde la hora cero no implica que el sector siempre ha trabajado 100% de acuerdo a las posibilidades. No es fácil generar acciones «normales» en medio de un contexto como el que hemos atravesado, y aún no sabemos por cuánto tiempo. Todo implicó un equilibrio, conocimiento y a la vez tratar de informarnos adecuadamente para llevarlo adelante de la mejor manera posible», destacó.
Por otro lado, expresó que «si bien nuestros ingresos bajaron totalmente, como le ha pasado a tantas instituciones, nuestras instalaciones están a disposición porque es importantísimo atender la coyuntura y favorecer todas las acciones que pueden resolver la emergencia», dijo la presidente.
Grandes preocupaciones políticas
A modo de cierre, la titular de la Sociedad Rural de Rafaela dijo que hubo dos cuestiones «muy fuertes» que preocuparon y siguen preocupando al sector: «el retiro de la negociación del Mercosur por un lado y por otra parte la propuesta para volver a la Junta Nacional de Granos. Fueron dos temas muy complejos y preocupantes. Pareciera ser que en Mercosur se da marcha atrás y con respecto a la Junta, por ahora quedarían las cosas como están. Son alertas y eso hace que debamos estar muy atentos. Nosotros venimos de políticas que nos han llevado a un alto porcentaje de pobreza, y no queremos repetir los viejos errores. Queremos reconstruir la sociedad, no repetir los viejos errores», dijo Bessone.
Por último, aclaró que «el desdoblamiento cambiario es un tema muy preocupante. Nosotros vendemos a 40 o 50 pesos, valor dólar, e imaginate cuáles son los precios del dólar en el mercado. Entonces a la alta presión impositiva, son todos los impuestos que debemos pagar como cualquier ciudadano, y además tenemos esta diferencia. Y la rentabilidad es para la reinversión y nuevos trabajos, no es para uno solo. Y más en el sector agropecuario. Si el sector logra precios para sus productos, una rentabilidad mínima, va a hacer inversiones en máquinas, vuelve el dinero y se generan nuevos trabajos. Y con esta alta presión impositiva y retenciones, se hace imposible», finalizó.
La muestra anual está bajo análisis
Sabido es que esta pandemia está suspendiendo todos los eventos importantes que nuestra ciudad tiene año a año. Y dentro de ese calendario, aparece la nueva muestra de la Sociedad Rural, que obviamente ya está en duda por todo el movimiento que generalmente implica.
Pero ante esta realidad, la presidente de la entidad dijo que «no nos podemos quedar de brazos cruzados» en referencia a algunas actividades que sí se podrían hacer a pesar de las restricciones y puso como mes de referencia a octubre, aunque todo será relativo y estará sujeto a lo que pase en el país con el Covid 19: «sigue siendo un tema de debate entre la comisión y los socios», dijo Norma Bessone al respecto y agregó que «quizá no en su formato tradicional, pero pensamos en positivo y por allá, por octubre, tratemos de compartir entre todos. La idea es hacer algún tipo de muestra, mantener algunas actividades, pero vamos a ver de qué forma nos permite también la flexibilización. No podemos quedarnos de brazos cruzados, ya que hay muchas actividades que podemos tener en cuenta y darle alguna forma», finalizó.