Por Romina Romero – Presidente de Gama
El 15 de octubre se conmemora el Día Internacional de las Mujeres Rurales con el objeto de reconocer y visibilizar el trabajo de la mujer en ese ámbito, además de su contribución en el desarrollo rural y agrícola, y la mejora en la seguridad alimentaria de la población, estableciendo una relación amigable con el medioambiente, desarrollando las tareas con miras a lograr una producción sustentable y sostenible.
La participación de la mujer en el sector agropecuario es decisiva y de vital importancia; genera orgullo y admiración ver la gran dedicación y entusiasmo que dedican a su labor. Las mujeres han demostrado la capacidad de incursionar en todos los ámbitos económicos y productivos, participando en la actividad rural como agricultoras, micro emprendedoras, productoras, artesanas, amas de casa, tamberas, administradoras, entre otras.
Si bien se han logrado avances, quedan muchas asignaturas pendientes, debemos continuar bregando por la mejora sustantiva del modo de vida y el acceso a los servicios básicos en el ámbito rural (educación, salud, justicia, seguridad, comunicaciones y conectividad, caminos transitables, cultura, mejora de la calidad de vida, etc), equiparando de esta manera los derechos de las mujeres que viven en las zonas rurales y urbanas.
Las mujeres rurales son agentes clave para conseguir los cambios económicos, ambientales y sociales necesarios para el desarrollo sostenible, trabajando en forma complementaria y coordinada con los varones.
Se necesita seguir trabajando en impulsos para que más mujeres estén en puestos de liderazgo y toma de decisiones, a la hora de diseñar leyes, estrategias, políticas y programas vinculados a la ruralidad, la tierra y el cuidado ambiental.
La naturaleza es una maestra que nos muestra nuestra pequeñez y nos enseña que podemos renacer siempre. Así como toda crisis es una oportunidad, tenemos que valorar y disfrutar el milagro de los ciclos de la naturaleza y la filosofía que nos propone como forma de vida. Eso nos convoca a seguir reinventándonos para darle continuidad a nuestro lugar en el mundo. (Adriana Meli, en «Mujeres rurales en primera persona, un homenaje a todas ellas». https://fca.uncuyo.edu.ar/mujeres-rurales-en-primera-persona-un-homenaje-a-todas-ellas.)
